Tanto los SSD SATA como NVMe llevaban ya bastante tiempo bajando de precio, pero ciertamente llevan ya bastante tiempo con unos precios que no varían en demasía, tan solo un puñado de euros en periodos de ofertas, pero no se ven ni siquiera ofertas demasiado sustanciales salvo casos aislados. Parece por lo tanto que el precio de los SSD se ha estabilizado, y por fortuna lo ha hecho en su precio mínimo.
El precio de los SSD ya no va a bajar más
Según los analistas de mercado, el precio de los SSD se ha estabilizado y desde el tercer trimestre del año pasado ya no ha vuelto a subir. La mala noticia es que tampoco ha bajado desde entonces, y según estos analistas no se prevé que vaya a seguir bajando. A continuación podéis ver algunos ejemplos con la tendencia de precio de algunos de los modelos de SSD más vendidos (cortesía de ComputerBase):
Crucial MX500 1 TB
Samsung 860 EVO 1 TB
En las gráficas de arriba se puede ver claramente la tendencia descendente desde que comienzan a contar en enero de 2018 y hasta mediados de 2019, momento en el que el precio se estabiliza y las variaciones son escasas y de poca cantidad, denotando que hemos llegado a un punto de inflexión en el que el precio de los dispositivos de estado sólido se ha estabilizado. Y, como hemos mencionado antes, lo malo es que los analistas de mercado prevén que se van a quedar así y que los precios no van a seguir bajando, por lo menos no a corto o medio plazo.
¿Es ahora el mejor momento para comprar un SSD?
Ahora que el precio está en mínimo histórico y además estable es inevitable hacerse la pregunta de si es ahora el mejor momento para invertir en un nuevo SSD. Si nos fiamos de las previsiones de los analistas de mercado, desde luego que la respuesta es un sí rotundo ya que si los dispositivos de estado sólido están a su mínimo precio histórico y no se prevé que vayan a bajar más, es ahora el mejor momento para comprar un SSD.
Como sabéis los SSD proporcionan un excelente rendimiento de almacenamiento y es de hecho el elemento de hardware que primero deberíais actualizar en un PC para mejorar su rendimiento a nivel global, ya que no solo tendréis mayor velocidad de transferencia, sino que el PC iniciará más rápido y se reducen todos los tiempos de carga, ya no solo de juegos sino al ejecutar cualquier aplicación.
No cabe duda de que hoy en día merece la pena tener un SSD en el sistema, sea un PC gaming, de trabajo o básico para multimedia y ofimática porque la mejora de rendimiento con respecto a un disco mecánico merece la pena, así que ahora que los precios de los SSD están en su mínimo y además no van a bajar más, ahora es el mejor momento para comprar un nuevo SSD.
